Café de México - Rancho Grande, la tierra del café de altura
22:21:00
Rancho Grande, la tierra del café de altura
Evitaron la roya mediante el mejoramiento de semillas
por Denisse Pérez Antonio
Rancho Grande, Tuxtepec, Oaxaca. Entre la montaña, a más de mil 300
metros sobre el nivel del mar, se encuentra un lugar en el cual sus
habitantes han encontrado la forma de subsistir con la producción de
café, pero sobre todo de brindar un producto orgánico y de calidad.
Café de altura
Sabor y cuidado al medio ambiente, son las dos características que
definen al Café Ñeey, la marca de productos que se han dedicado por 16
años a mejorar semillas para evitar la enfermedad de la roya, además de
generar ingresos por medio del trabajo colectivo de los 63 socios de la
cooperativa.
Perfecto Manuel Mendoza, presidente de la Cooperativa Producción
Rural Café Ñeey de Rancho Grande Valle Nacional, menciona que en el año
2000 recibieron el asesoramiento de alumnos y profesores de la
Universidad Autónoma de Chapingo e instalaron un campo demostrativo con
20 variedades de café, con el resultado de una semilla resistente a la
roya.
Manuel Mendoza explica que esta aportación los ha impulsado a tener
un tipo de café único y que se ha convertido en el principal sustento de
la población, "el proyecto consiste en que los del pueblo puedan
solventar a la familia vendiendo sus productos en el mercado cercano".
Además de los beneficios obtenidos contra la enfermedad de la planta,
los productores de Ñeey han descubierto las ventajas de lo orgánico en
sus procesos de producción, logrando la certificación como un valor
agregado a su producto, "el café orgánico no usa herbicidas, abono
químico ni insecticidas, todo es con manejo orgánico, la limpia del
terreno se hace con machetes y el insecticida es agua con ajo" menciona
el productor del aromático en Tuxtepec.
La certificación es anual y está a cargo de Certificadora Mexicana de
Productos y Procesos Ecológicos (Certimex), por lo que Café Ñeey cuenta
con un certificado de inspección basado en las normas de la Unión
Europea y la acreditación del USDA NOP, lo que los acredita como una
empresa verde en sus procesos de producción, válido también en el
mercado de Estados Unidos.
Los productores realizan una serie de pasos para fortalecer las
normas de la certificación, primero con el mejoramiento del suelo
reutilizando las cascarillas del grano de café para abono natural; son
cuidadosos con los residuos sólidos como el pet, otro de los aspectos,
es la limpia de los terrenos con machete para no deforestar y aprovechar
los nutrientes de las plantas restantes.
"Todo está en el sabor, en el cuidado que se le dan a las plantas,
más las condiciones climáticas que favorecen a la producción", explica
Perfecto Manuel.
El beneficio económico ubica a este tipo de café como el más
redituable, ya que el kilo en pergamino se encuentra en 40 pesos en
comparación con el café de siembra convencional con 28 pesos en venta.
La fuerte organización de sus pobladores ha logrado la acreditación
de más de 180 hectáreas que tienen actualmente en producción. Se suma a
esto el vivero de más de 60 mil plantas mejoradas, las cuales obtuvieron
con el apoyo de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos
Indígenas (CDI).
Por ahora, la Producción Rural Café Ñeey de Rancho Grande Valle
Nacional, comercializa su grano con el mercado local, ya que se
encuentra a la espera del crecimiento de sus plantas y posteriormente
lograr un extenso mercado con su innovador producto, "con esto buscamos
cuidar la tierra, la vida de los pobladores y reducir la contaminación".
Rancho Grande, un pueblo modelo
Este lugar no sólo es tierra del café, sino heredero de las costumbres y tradiciones de la región de la Chinantla.
La comunidad de Rancho Grande es como un pequeño paraíso, sus menos
de 200 habitantes y su minuciosa organización lo hace un pueblo modelo,
ubicado a menos de 40 minutos de Valle Nacional en la región del
Papaloapan.
La mayoría de sus habitantes se dedican a la producción y siembra del
café orgánico, actividades del campo, la elaboración de huipiles
típicos, producción de miel de abeja melipona, una especie endémica de
la región y recientemente están incursionando en el ecoturismo.
Es una comunidad emprendedora que encuentra su principal fortaleza en la unión y el trabajo colectivo
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